Roma esta fría en esta Navidad. Desde Plaza del Esquilino, sede de la Embajada argentina se ve pasara a los transeúntes cariacontecidos; no están contentos, están ocupados comprando, pre ocupados por lo que podrán comprar, no podrán comprar, quisieran comprar... No es razonable miararlos y compararlos con los argentinos que no pueden comprar o que, están ocupados escrutando un futuro ignoto. No es razonable pero es difícil no hacerlo.
Por la noche, a las 19.30 una misa especial – en castellano – en la Iglesia argentina de Roma, presentes la embajadora argentina en Italia, Elsa Kelly y el embajador argentino ante la Santa Sede Vicente Espeche, muchos diplomáticos argentinos, argentinos residentes y ni una sola representación oficial (o extraoficial) italiana. Afuera hiela.
Nueve sacerdotes oficiando y un grupo de monjas con guitarra, acompañando.
Sorpresa para quien no escucha el Padrenuestro desde hace años la parte donde decia “perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores ha sido sustituida por “perdona nuestras ofensas...” Hacia el final un pedido especial a la imagen de la Virgen de Lujan que luce en esta extraña iglesia de principios de siglo pasado pero con formas medievales.
Amigos, empresarios, políticos preguntan por la situación argentina probablemente con sincera preocupación. No puede evitarse llegar al tema del cese (temporario) de la deuda argentina y qué piensa hacer nuestro gobierno. Obviamente no sabemos que contestar mas allá de las lecturas de discursos y diarios y algún correo electrónico. Lo que se calla es preguntar ¿ y Ud. Qué piensan hacer?
La mas solidaria es la gente de la calle, el vendedor de libros que esta frente a la Universidad Pontificia dice “como es que no nos ocupamos de los argentinos ahora que lo necesitan y ellos se ocuparon de nosotros después de la guerra”.
Observadores políticos nos reprochan el mal manejo de la economía y la política. Quieren discutir con nosotros el “prontuario” de algunos recién nombrados (desgraciadamente el sustantivo pertenece a uno de ellos). Admitimos, admitimos, admitimos pero no basta. Mas allá de nuestras concusiones, ineficacias, nos parece que el tema nos trasciende. Nuestra recesión es el resultado de todos nuestros defectos, lo admitimos, pero también de una coyuntura internacional en la cual nuestros productos son penalizados, los países líderes mantiene sus barreras aduaneras, las multinacionales y los capitales flotantes no tienen limites.
Que el Fondo Monetario y los EEUU quieran usar el caso argentino para hacer escarmiento y mostrar al mundo cuan duros pueden ser cuando quieren. No tenemos dudas que pueden hacerlo, mirando lo que hicieron en Afganistán, nos han convencido; pero que tenemos que ver nosotros con el terrorismo internacional? ¿O son también terroristas los ineficientes gastadores que no tiene un gran respeto por la ley ? .
No llegamos a entender porqué a nosotros, porqué la Unión Europea no sale a ayudarnos así como lo prometio. No entendemos como Italia pueda mandar tropas a Afganistán y no ayuda a Argentina. Y lo piensan muchos italianos.
Una pregunta comienza a hacerse camino además de todas nuestras deficiencias no habrá algún problema serio en la globalizacion de la economía tal que lo que pasa hoy en Argentina puede pasar mañana en Colombia o Corea o en Turquía?. Si la respuesta es no porque Turquía es una base Nato, tal vez podamos entender porqué los turcos tratan de aclarar que “no son Argentina”. Pero no basta para el resto de los piases latinoamericanos o de cualquier otra parte del mundo por donde no pase un interés bélico actual .
La nuestra no es una pregunta retórica, ni si quiera con contenido moral. Queremos realmente saber si somos un caso tan especial y en qué consiste esta diferencia o si somos la primeras víctimas ilustres de un orden económico internacional intolerable.
Nueve sacerdotes oficiando y un grupo de monjas con guitarra, acompañando.
Sorpresa para quien no escucha el Padrenuestro desde hace años la parte donde decia “perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores ha sido sustituida por “perdona nuestras ofensas...” Hacia el final un pedido especial a la imagen de la Virgen de Lujan que luce en esta extraña iglesia de principios de siglo pasado pero con formas medievales.
Amigos, empresarios, políticos preguntan por la situación argentina probablemente con sincera preocupación. No puede evitarse llegar al tema del cese (temporario) de la deuda argentina y qué piensa hacer nuestro gobierno. Obviamente no sabemos que contestar mas allá de las lecturas de discursos y diarios y algún correo electrónico. Lo que se calla es preguntar ¿ y Ud. Qué piensan hacer?
La mas solidaria es la gente de la calle, el vendedor de libros que esta frente a la Universidad Pontificia dice “como es que no nos ocupamos de los argentinos ahora que lo necesitan y ellos se ocuparon de nosotros después de la guerra”.
Observadores políticos nos reprochan el mal manejo de la economía y la política. Quieren discutir con nosotros el “prontuario” de algunos recién nombrados (desgraciadamente el sustantivo pertenece a uno de ellos). Admitimos, admitimos, admitimos pero no basta. Mas allá de nuestras concusiones, ineficacias, nos parece que el tema nos trasciende. Nuestra recesión es el resultado de todos nuestros defectos, lo admitimos, pero también de una coyuntura internacional en la cual nuestros productos son penalizados, los países líderes mantiene sus barreras aduaneras, las multinacionales y los capitales flotantes no tienen limites.
Que el Fondo Monetario y los EEUU quieran usar el caso argentino para hacer escarmiento y mostrar al mundo cuan duros pueden ser cuando quieren. No tenemos dudas que pueden hacerlo, mirando lo que hicieron en Afganistán, nos han convencido; pero que tenemos que ver nosotros con el terrorismo internacional? ¿O son también terroristas los ineficientes gastadores que no tiene un gran respeto por la ley ? .
No llegamos a entender porqué a nosotros, porqué la Unión Europea no sale a ayudarnos así como lo prometio. No entendemos como Italia pueda mandar tropas a Afganistán y no ayuda a Argentina. Y lo piensan muchos italianos.
Una pregunta comienza a hacerse camino además de todas nuestras deficiencias no habrá algún problema serio en la globalizacion de la economía tal que lo que pasa hoy en Argentina puede pasar mañana en Colombia o Corea o en Turquía?. Si la respuesta es no porque Turquía es una base Nato, tal vez podamos entender porqué los turcos tratan de aclarar que “no son Argentina”. Pero no basta para el resto de los piases latinoamericanos o de cualquier otra parte del mundo por donde no pase un interés bélico actual .
La nuestra no es una pregunta retórica, ni si quiera con contenido moral. Queremos realmente saber si somos un caso tan especial y en qué consiste esta diferencia o si somos la primeras víctimas ilustres de un orden económico internacional intolerable.
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